Fotografiando el Parque Nacional del Masai Mara

El Masai Mara, ubicado en Kenia y compartiendo frontera con el famoso Parque Nacional del Serengeti en Tanzania, es un destino espectacular que ha ganado renombre a nivel mundial. Su rica biodiversidad y abundante vida salvaje lo convierten en un paraíso para los amantes de la naturaleza y la fotografía.

Esta reserva natural alberga a gran parte de los Cinco Grandes: león, elefante, búfalo y leopardo, junto con una impresionante variedad de depredadores y majestuosas manadas de ñus y cebras. Cada año, el Masai Mara es escenario de uno de los eventos más impresionantes de la vida salvaje: la gran migración. En este asombroso ciclo ancestral de la naturaleza, innumerables animales cruzan sus vastas llanuras en busca de nuevos pastizales y agua.

La gran migración es un espectáculo increíble que atrae a fotógrafos y amantes de la naturaleza de todo el mundo. Sin embargo, fotografiar la vida salvaje en esta reserva natural no es tarea fácil, ya que requiere de cierta técnica y destreza que solo se pueden mejorar a través de la práctica constante y el conocimiento de tu cámara fotográfica.

En este artículo, te explicamos nuestra experiencia fotografiando el Masái Mara y todo lo que necesitas saber para fotografiarlo.

Experiencia Fotográfica

Dedicamos un total de 4 días a visitar el Parque Nacional del Masai Mara, completando nuestro recorrido por Kenia de una semana, donde previamente habíamos visitado los lagos del Rift: Nakuru y Navaisha.

Uno de los objetivos fotográficos de nuestra visita al Masai Mara era poder fotografiar a los denominados “big cats”, que incluye entre otros los leones, leopardos y guepardos. No obstante, nuestra intención era poder fotografiar a depredadores de todo tipo y, a poder ser, acción de algún tipo.

Lo primero que debes saber es que encontrar animales en el Masai Mara no es sencillo. La mayoría de los animales pueden camuflarse bastante bien en la sabana, y es algo que necesitan para sobrevivir: los depredadores se camuflan entre la vegetación para poder cazar y alimentarse, mientras que las presas deben pasar desapercibidas para evitar ser cazadas.

Por este motivo, no es fácil encontrar animales, especialmente depredadores, y tendrás que buscar entre las llanuras.

Otra cosa que debes tener en cuenta es que en las zonas donde normalmente habitan leones, no encontrarás cebras, ñus ni ningún tipo de animal que puedan ser presa de los leones. Normalmente, los leones habitan en amplias llanuras donde solo encontrarás animales carroñeros, como los chacales o los buitres, que se aprovechan de las sobras de los depredadores. Por tanto, debes tener en cuenta que si le pides a tu guía que te lleve a ver depredadores, pasarás un buen rato sin ver animales hasta que, si tienes suerte, encuentres una manada de leones o algún carroñero en el camino.

Por otro lado, en las zonas donde habitan los herbívoros, como los ñus y las cebras, verás muchos animales, pero no será tan espectacular como encontrar un “big cat” o alguno de los "big 5".

En nuestro caso, decidimos dedicar un día a la búsqueda de depredadores, y pasamos muchas horas buscando sin encontrar ningún tipo de vida a lo largo del camino, hasta que finalmente dimos con ellos y pudimos presenciar un ataque a un jabalí.

Lo que queremos decir con esto es que un safari fotográfico requiere paciencia y tener claro qué quieres buscar y fotografiar. Y, sobre todo, es importante tener expectativas realistas sobre lo que implica buscar animales que se camuflan en una sabana infinita.

Ajustes de Cámara

Antes entrar en matéria sobre los ajustes específicos de una cámara para fotografía de fauna, si no tenéis claro qué equipo fotográfico llevaros de viaje (cámara, objetivo, accesorios, etc) es recomendable que os leáis el siguiente artículo que hemos preparado dedicado a la selección del equipo fotográfico para un safari.

Si ya tenéis claro con qué equipo viajaréis a África y os subiréis al 4x4 en búsqueda de fauna salvaje, el siguiente paso es programar los ajustes específicos para fotografía de fauna, que os los detallamos a continuación:

  • MODO DE FOTOGRAFÍA

El modo de fotografía recomendado es el formato RAW, un archivo sin comprimir que podréis manipular durante el proceso de postprocesado para conseguir los colores y el estilo deseados con mayor flexibilidad.

El formato RAW conserva una mayor cantidad de información y detalles de la imagen original, lo que os brinda más libertad para ajustar aspectos como la exposición, el balance de blancos, la reducción de ruido y la nitidez durante la edición posterior. Esto es especialmente útil en entornos como un safari, donde las condiciones de luz pueden variar rápidamente.

Por otro lado, el formato JPG es una opción comprimida que resulta adecuada si no planeáis retocar vuestras fotos después de tomarlas. Sin embargo, al elegir JPG, sacrificáis parte de la flexibilidad y calidad de imagen que ofrece el formato RAW. Es importante tener en cuenta que, una vez tomadas las fotos en formato JPG, los ajustes que se pueden realizar durante la edición posterior son limitados, ya que la información original de la imagen se ha comprimido y reducido.

  • VELOCIDAD DE EXPOSICIÓN

La velocidad de obturación recomendada para la fotografía de fauna es de al menos 1/800 de segundo. En un safari, por lo general, habrá mucha luz disponible, lo que permite aumentar la velocidad de exposición sin problemas. Además, al disparar con objetivos largos desde un vehículo de safari, incluso la más mínima vibración puede afectar la nitidez de la imagen. Por lo tanto, un buen punto de partida es utilizar una velocidad de obturación de 1/800, y aumentarla si se detecta movimiento o se espera capturar un momento de acción, como un ataque.

Aunque sea necesario aumentar el ISO para mantener velocidades de obturación más rápidas, es preferible hacerlo, ya que el ruido generado por el ISO alto se puede corregir en el proceso de postprocesado, mientras que una imagen borrosa debido a una velocidad de obturación demasiado lenta puede ser irreparable.

Además, es importante tener en cuenta que a medida que aumenta la longitud focal de la lente, mayor deberá ser la velocidad de obturación para evitar el efecto de trepidación. Se recomienda utilizar una velocidad mínima de obturación igual a 1 dividido por la distancia focal. Por lo tanto, si estás utilizando una lente de 600 mm, la velocidad de obturación mínima debería ser de al menos 1/1200 de segundo. Esto ayudará a garantizar que las imágenes sean nítidas y libres de vibraciones, incluso al capturar sujetos distantes con teleobjetivos largos.

  • APERTURA DE DIAFRAGMA

La apertura del diafragma dependerá del tipo de fotografía que estéis realizando y del tipo de composición que os interese. Por lo general, cuando se busca aislar al sujeto del fondo, se prefiere una apertura de diafragma más amplia, como f/2.0, f/2.8 o f/4.0.

Por otro lado, al fotografiar paisajes u escenas donde se desea una mayor profundidad de campo, se prefiere una apertura más cerrada, como f/8.0, para maximizar la zona de enfoque en la imagen y obtener una nitidez en todo el plano.

Una opción práctica es utilizar el modo de prioridad de apertura en la cámara, lo que permite ajustar la apertura del diafragma mientras la cámara selecciona automáticamente la velocidad de obturación y el ISO. Esto resulta útil cuando se necesita una rápida respuesta y no se dispone de tiempo para configurar manualmente todos los ajustes, como en situaciones donde se fotografían sujetos en movimiento o se necesita capturar un momento fugaz.

Sin embargo, cuando se dispone de tiempo y se busca un control total sobre la exposición, es recomendable configurar todos los ajustes de forma manual, especialmente al fotografiar paisajes, donde se puede tomar el tiempo necesario para ajustar la apertura, la velocidad de obturación y el ISO según las condiciones de luz.

  • ISO

Para obtener la mejor calidad de imagen, es recomendable utilizar un valor de ISO alrededor de 100, ya que esto proporciona una sensibilidad baja que reduce al mínimo el ruido en la imagen. Sin embargo, en muchas situaciones, puede resultar necesario aumentar la sensibilidad ISO para obtener una velocidad de obturación más rápida y así evitar el movimiento no deseado en la imagen. En tales casos, se puede utilizar un rango de ISO entre 100 y 6400 para adaptarse a las condiciones de luz y a las necesidades de la situación fotográfica de forma automática.

Es importante tener en cuenta que al aumentar el ISO, se incrementa la sensibilidad del sensor a la luz, pero también aumenta la posibilidad de introducir ruido en la imagen. Sin embargo, gracias a los avances en la tecnología de procesamiento de imágenes, el ruido generado por un ISO alto se puede corregir con facilidad durante el proceso de postprocesado, especialmente si se dispara en formato RAW. Por lo tanto, aunque se utilice un ISO más alto para garantizar una velocidad de obturación adecuada, se puede confiar en la capacidad de corregir el ruido durante la edición posterior, manteniendo así la calidad general de la imagen.

  • MODO DE ENFOQUE

El modo de enfoque recomendado para fotografía de safari es el modo automático continuo (AF-C). Este modo es fundamental en la fotografía de fauna y cualquier situación en la que el sujeto se encuentre en movimiento. El modo de autoenfoque contínuo permite que la cámara ajuste constantemente el enfoque mientras el sujeto se mueve, garantizando así que las imágenes capturadas estén nítidas y bien enfocadas en todo momento.

Cuando se activa el autoenfoque continuo, la cámara realiza un seguimiento constante del sujeto en movimiento, ajustando automáticamente el enfoque según sea necesario para mantenerlo nítido y claro en el encuadre. Esto es especialmente útil al fotografiar animales en movimiento, como depredadores cazando o aves en vuelo, donde la velocidad y la imprevisibilidad del sujeto hacen que sea difícil mantener el enfoque manualmente.

  • MODO DE DISPARO

El modo de disparo recomendado para la fotografía durante un safari es el modo de ráfaga.

Cuando se está en un safari, hay momentos que pueden pasar rápidamente, como un animal en movimiento, una interacción entre especies o una expresión única. Utilizar el modo de ráfaga permite capturar una secuencia de imágenes en rápida sucesión, lo que aumenta las posibilidades de capturar el momento perfecto.

Además, el modo de ráfaga es especialmente útil al fotografiar animales en movimiento, ya que permite capturar una serie de imágenes mientras el sujeto se desplaza, lo que aumenta las probabilidades de obtener al menos una imagen nítida y bien compuesta.

Algunas cámaras ofrecen diferentes velocidades de ráfaga para adaptarse a las necesidades del fotógrafo, desde ráfagas más lentas para situaciones más estáticas hasta ráfagas más rápidas para capturar acción rápida.

Composición

La composición es otro de los elementos clave que diferencian una buena fotografía de una mala. A continuación os presentamos algunas de las reglas básicas de composición y ejemplos de aplicación:

1. Regla de los Tercios: Divide tu encuadre mentalmente en nueve secciones iguales utilizando dos líneas horizontales y dos verticales. Coloca el sujeto principal o el punto focal de interés en uno de los puntos de intersección o a lo largo de las líneas para crear una composición visualmente atractiva y equilibrada.

 
 

Por ejemplo, en la imagen anterior, podéis ver que situamos la leona en la esquina izquierda del tercio inferior con el fin de dar una sensación de equilibrio en la imagen.

2. Espacio Negativo: Deja espacio adicional alrededor de tu sujeto principal para crear lo que se conoce como "espacio negativo". Esto puede ayudar a resaltar al sujeto y a transmitir una sensación de amplitud y libertad en la imagen. Por ejemplo, si estás fotografiando un animal mirando hacia un lado, deja espacio en la dirección hacia la que mira. Podéis ver un ejemplo a continuación:

 
 

3. Encuadre Natural: Aprovecha los elementos naturales del entorno para enmarcar tu sujeto principal. Puedes utilizar árboles, arbustos o formaciones rocosas para crear un marco natural alrededor del sujeto, lo que ayuda a dirigir la atención del espectador hacia él y a añadir profundidad a la imagen. Este enfoque también puede proporcionar contexto y mostrar el hábitat del animal, agregando interés y narrativa a la fotografía de safari. Experimenta con diferentes ángulos y posiciones para encontrar el encuadre natural más efectivo en cada situación.

Para realizar este tipo de fotografía seguramente tendréis que utilizar el modo manual, ya que a la cámara le costará encontrar el punto de enfoque en el ojo del animal.

4. Patrones y Repeticiones: Busca patrones y repeticiones en la naturaleza, como manadas de animales, filas de árboles o huellas en la arena. Estos elementos pueden agregar ritmo y textura a tus imágenes, creando un impacto visual fuerte y una sensación de armonía en la composición. Tenéis un ejemplo a continuación con una manada de jirafas que nos encontramos por el camino:

5. Perspectiva y Escala: Utiliza la perspectiva y la escala para transmitir la grandeza y la majestuosidad de la vida salvaje y el entorno en el que se encuentra. Experimenta con ángulos bajos para resaltar la altura de los animales o utiliza elementos en primer plano para crear una sensación de profundidad y dimensión en tus fotografías.

 
 

FOTOGRAFÍA DESDE EL COCHE

Para lograr fotografías de la calidad que hemos presentado en ejemplos anteriores, es crucial contar con el equipo adecuado para estabilizar vuestra cámara mientras estáis en el safari. Dos opciones populares son una bean bag o un monopod. En nuestro caso, recomendamos el uso de una bean bag, como la que se muestra a continuación:


Una bean bag para safari es un accesorio imprescindible para estabilizar tu cámara en el vehículo durante el safari, proporcionando un soporte firme y estable para capturar imágenes nítidas y bien compuestas incluso en condiciones de movimiento.

La bean bag proporciona un soporte estable y versátil para vuestra cámara, lo que os permite capturar imágenes nítidas y bien compuestas incluso en condiciones de movimiento o vibración, como las que pueden experimentarse desde un vehículo en movimiento durante un safari. Su diseño portátil y fácil de transportar la hace ideal para llevarla consigo durante vuestros viajes de fotografía de fauna.

Ya sea que estéis fotografiando animales en movimiento o paisajes impresionantes, contar con una bean bag confiable puede marcar la diferencia en la calidad de vuestras imágenes. Aseguraos de incluir este accesorio esencial en vuestro equipo fotográfico para obtener resultados profesionales y satisfactorios en vuestras aventuras de safari.